miércoles, 20 de febrero de 2013

EL BIEN Y EL MAL


Muchas veces he oído decir que lo que está bien o mal es relativo, que depende de cada uno. Desde mi punto de vista esto es falso, pues las cosas han sido creadas de una sola forma, y por lo tanto una misma acción no puede ser a veces buena mientras que otra mala.
Creo, y supongo que vosotros también lo creeréis así, que lo que está bien es aquello que beneficia, y lo que está mal es aquello que perjudica.
Si esto es tan simple, ¿por qué parece tan subjetiva la decisión sobre si algo está bien o mal?
Imaginad algo que estuviera hecho de diferentes fragmentos, un edificio que estuviese construido a base de ladrillos malos y ladrillos buenos, ¿ese edificio es bueno o malo?

Algo así pasa en la vida, las acciones que realizamos y decisiones que tomamos están formadas por rasgos buenos y malos, nada suele ser perfectamente bueno ni perfectamente malo, nosotros valoramos esas pequeñas partes por las que están compuestas dichas acciones, y les damos un valor, un peso, eso ya es algo subjetivo, y dependiendo qué peso queramos darle a los pros y a los contras, la balanza se inclinará hacia un lado o hacia otro.
Por eso es tan subjetivo esto, pero repito, una misma cosa no puede ser a veces buena y otra mala, simplemente las cosas son como son.
Por ejemplo, si una persona decide clavar un puñal a otra sin ningún motivo, es evidente que está mal. Sin embargo, si una persona es atacada y la intentan matar, y en defensa propia mata a la otra persona, también está mal, puesto que ha matado a alguien. La acción de matar es mala siempre. Sin embargo, hay que matizar alguna diferencia. En el primer caso, el acto de matar ha sido motivado por la intención de quitar una vida, y en el segundo caso por la intención de salvar una vida. El resultado ha sido el mismo, pero el motor de esas acciones ha sido completamente diferente. En consecuencia, en el primer caso se ha tomado una mala decisión, mientras que en el segundo se ha tomado una buena decisión.
Otro ejemplo sería el de las mentiras piadosas, mentir está mal, pero a veces ocultar la verdad puede ser la mejor decisión.
Aquel que dona dinero solo para quedar bien ante los demás, pues hombre está bien ayudar a los demás, pero desde luego no es lo mismo que si ese acto ha sido motivado por una intención altruista.
Hay gente que vive obsesionada con tratar de contentar siempre a los demás, y hacer siempre lo correcto, pero eso es vivir estancado en el miedo al qué dirán, y siempre, se haga lo que se haga, habrá gente que te apoye, gente que te critique y gente que se mantenga indiferente; es decir, no debemos obsesionarnos siempre con actuar bien o mal, simplemente debemos analizar los pros y los contras de las situaciones y tomar la decisión más beneficiosa. A veces la opción más beneficiosa es mala, y a veces la más perjudicial será buena. Es decir, que no debemos escoger la opción buena, sino que debemos escoger la opción más beneficiosa posible.


Otra cosa curiosa que veo es que el bien y el mal van siempre de la mano, cuanto más bueno o malo sea alguien, el bien y el mal lo seguirán con mayor intensidad, es lo que ocurre, por ejemplo, con Jesucristo, con Gandhi, con Martin Luther King, fueron realmente grandes, y tenían gente que los seguía y era capaz de dar la vida por defender el mensaje que proclamaban, y también había gente que quería asesinarlos. Lo mismo ocurre por ejemplo con Bin Laden, Hitler, Stalin, no es que hayan hecho cosas grandes, pero se parecen a los otros en que también han sido perseguidos y apoyados.
Aquellos que dejan a la gente indiferente, es porque no han hecho algo que les haga inclinarse a los demás hacia un lado u otro.

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